Call for papers. Número 39.

Contribuciones desde la obra de José Luis Villacañas a la Historia, La Política y la Filosofía.

Fecha de inicio: 2025-02-01

Fecha de cierre: 2025-06-15

Publicación definitiva: 2026-01-01

Editora temática:  Nicol A. Barria-Asenjo.

https://orcid.org/0000-0002-0612-013X Correo electrónico: nicol.barriaasenjo99@gmail.com

Enfoque:

 El intento de trazar una clara división entre el devenir biográfico, el abismo subjetivo y el acontecimiento que propicia la aparición del autor ciertamente parecen ser una división que bordea lo imposible. Recordemos que la misma intención de interpretación es ya una apuesta compleja, en palabras de José Luis Villacañas encontramos: “la interpretación de un texto, por ello, supone ante todo saber leer y desentrañar la autointerpretación que el texto hace de sí en la medida en que se coloca en el seno de cierto discurso, antes de cuestionar lo que desde nuestra autointerpretación podemos decir sobre él” (p. 150). Desde esta compleja posición debemos intentar movilizarnos para adentrarnos en el entramado discursivo y textual que emerge en cada producción, ¿qué es aquello que se nos revelará y nos espera en el horizonte intelectual?

 

De acuerdo con  Alfonso Galino Hervás y Enrique Ujaldón Benítez (2022) “La obra de José Luis Villacañas (1955) configura un corpus teórico unitario y reconocible con una extraordinaria potencialidad para interpretar la genealogía de la sociedad contemporánea y, en la misma medida, nuestro presente. Dicha obra, aún abierta, conforma una auténtica historia conceptual, capaz de mostrar y sacar rendimiento hermenéutico de la convergencia entre historia social e historia de los conceptos” (p.1).  Podemos situarnos y observar la apertura en el siglo XXI que ha logrado José Luis, en tanto intelectual que sabe visualizar la necesidad filosófica de nuestro tiempo que hay en la sociedad, la historia y la política, “para definir lo importante no tenemos ninguna otra institución que la filosofía” (Villacañas, 2021), desde esta reciente hipótesis, el autor se ha parado incorporando nuevos conceptos y líneas de investigación, que aún permanecen inexploradas.

 

Es menester recordar que desde la obra “Nueva Historia. Su Pasado y su Futuro" de Peter Burke (1991) encontramos que el dialogo entre las experiencias vitales y las huellas textuales[1] son un espacio de indagación que nos permite intentar alcanzar efímeramente la totalidad -siempre imposible de alcanzar-, un abismo filosófico nos espera en la medida en que iniciamos la labor del estudio de un texto, obra o sistema de pensamiento.

Es por ello que, no es nuestro objetivo encontrar una resolución al adentro /afuera de la teoría y líneas de pensamiento articuladas a lo largo de la vida -aún en construcción- del filósofo Villacañas. Tampoco pretendemos realizar una distinción entre el hombre y/o el intelectual. No nos parece honorable, en efecto, pensar en una división radical entre el hombre que escribe y la obra, este dualismo, más bien, ya fue superado desde hace bastante tiempo, recordemos de Jean Paul Sartre escribió:

"Cierto es que se ha eliminado en primer lugar ese dualismo que opone en lo existente lo interior a lo exterior. Ya no hay un exterior de lo existente, si se entiende por ello una piel superficial que disimularía a la mirada la verdadera naturaleza del objeto. Y esta verdadera naturaleza, a su vez, si ha de ser la realidad secreta de la cosa, que puede ser presentida o supuesta pero jamás alcanzada porque es «interior» al objeto considerado, tampoco existe. Las apariciones que manifiestan lo existente no son ni interiores ni exteriores: son equivalentes entre sí, y remiten todas a otras apariciones, sin que ninguna de ellas sea privilegiada (p.5)"

Buscamos retornar a la pregunta por la vigencia, relevancia y contribuciones que hay en las propuestas intelectuales que nos señalan nuevas modalidades para re-pensar el atolladero de nuestra época. Una época que se vuelve urgente de re-pensar. A este respecto, el mismo Villacañas (2015) nos recuerda que  “lo que en tiempos de estabilidad parecía una exageración, e incluso una patología, ahora se torna normalidad” (p.10).

Ahora bien, nos aceraremos a lo que Minogue (1981) definió como "the virtues of the method with the virtues of the book (p.533) frente a lo cual, tenemos la responsabilidad de comenzar a preguntarnos ¿cuál es el método filosófico que utiliza José Luis y que desencadena una serie de elementos fundamentales que operarán como legados nuestra época?  ¿Qué huellas teóricas nos permiten dilucidar la irreversibilidad ante la imposibilidad de no considerar su sistema de pensamiento?

Una situación similar encontramos al estudiar los orígenes de la colisión entre Historia y Filosofía, recordemos las palabras de Donal R. Kelly según quien “the object of history became philosophy itself, not vulgar doxographical fascination with the ´lives and opinions´of its practitioners but rather the ideas necessary for the understanding of man and nature” (p. 35).

Por su parte, Hegel (1816) nos entrega algunas pistas sobre aquel deseo que subyace en el proceso investigativo relacionado con la indagación y estudio de sistemas de pensamiento, en sus palabras escribe lo siguiente:

"Del mismo modo que abarcamos con la mirada, en una ojeada general, el paisaje, que luego perdemos de vista al internarnos en las diversas partes que lo forman, el espíritu quiere abarcar, ante todo, la relación existente entre las distintas filosofías y la filosofía en general, pues las diversas partes sólo cobran, en realidad, sentido y valor esencial por su relación con el todo (p.12)"

Esa ojeada general, esa mirada perdida en el todo es el objeto último de cualquier intento de análisis sistemático de una trayectoria intelectual, sin embargo, en el intento de darle una unidad, hemos de correr el riesgo de extraviar aquellos fragmentos que pueden ser fundamentales, y que, por pequeños (textos breves, artículos, intervenciones) nos parecen irrelevantes siendo una ingenuidad intolerable.

El moment político de nuestro siglo, siendo heredero de las catástrofes  así como también de las derrotas del siglo XX incorporó un complejo panorama para la escena intelectual emergente, es importante señalar que la responsabilidad intelectual, es en si misma una posición y tiene una responsabilidad política, una posición privilegiada que en tanto se mantiene en el privilegio sin hacer uso de aquello para denunciar[2] las mentiras de la política hacia las masas, corre el riesgo de tomar una posición equivocada en el espectro político. Incluso aquello que no se hace, aquello que decide ignorar, arroja pistas de una determinada posición. Incluso el silencio es un mensaje. Un silencio que no ha tenido lugar en la producción intelectual del filósofo español Villacañas y que nos lleva de retorno a abordar la responsabilidad y el deber de indagar y analizar su obra.

Para concluir, hemos de rememorar que José Luis Villacañas (1980) propuso pensar en las “metamorfosis de sentido que sufrían a menudo las mismas palabras” (p. 146) Siguiendo con la perspectiva del autor debemos observar “la posibilidad de comprender un concepto depende de la comprensión de su movimiento histórico, de su espacio de validez, de su situación temporal” (Villacañas, 1980, p. 148).

Entonces, hemos de emprender la labor de comprender los conceptos fundamentales que se han desarrollado desde temprana data en la trayectoria del filósofo español, ¿desde dónde y hacia dónde enfocar los primeros pasos en este desafío?

Este dossier busca trazar un rapeo general de sus conceptos fundamentales y analizar críticamente su producción intelectual y trayectoria en la “academia internacional”. 

REFERENCIAS. 

Anheim, É, Lilti, A., & Van Damme, S. (2009). Quelle histoire de la philosophie ? Annales. Histoire, Sciences Sociales, 64(1), 5-11. doi:10.1017/S0395264900028559

Bourdieu. P. 2008 Homo Academicus. Buenos Aires. Siglo XXI editores.

Braudel, F. (1957). Lucien Febvre et l'histoire. Annales. Histoire, Sciences Sociales, 12(2), 177-182. doi:10.1017/S0395264900117834

Galindo Hervás, A.., & Ujaldón Benítez, E.. (2022). Republicanismo contra neoliberalismo. Análisis de una propuesta para resistir la última versión de la teología política. Reseña de: José Luis Villacañas, Neoliberalismo como teología política. Habermas, Foucault, Dardot, Laval y la historia. Isegoría, (66), r07. https://doi.org/10.3989/isegoria.2022.66.res07

Kelley, D.R., (2002) The Descent of Ideas: The history of intellectual History. New York: Rourledge, Taylor y Francis Group.

Kelley, D. R (2002) Intelectual History and cultural history: The inside and the Outside. Vol, 15. No 2.  London: History Of The Human Sciences.

Minogue, K. R (1981) Method in Intellectual History: Quentin Skinner's Foundations. Philosophy, 56. Cambridge.

Villacañas, J (2015) Populismo. Madrid: La Huerta Grande Editorial.

 

 

[1] De acuerdo con Jemio (2008) “Dos raíces griegas [4] definen a esta composición: bios que significa vida y graphein que se refiere a la escritura, al dibujo y al grabado, también al acto de describir y de representar. Esta forma de expresión aparece en diversos lenguajes, clases y medios. Veamos el aspecto de los medios de difusión y distribución: por una parte encontramos producción de representaciones en crecimiento y objetos biográficos de valoración estética y económica. Por otra par- te, permanece la producción de carácter individual de cada repre- sentación, a lo que Zunzunegui denomina unicidad” (p.2)

[2] De acuerdo con Noam Chomsky (2012) encontramos una distinción en relación con las posiciones en la politica la distinción establecida comúnmente entre las “críticas responsables”, por un lado y las críticas “sentimentales”, “afectivas” o “histéricas”, por otro